El polen de abeja es uno de los superalimentos más completos de la naturaleza. Rico en proteínas, vitaminas, minerales y antioxidantes, este pequeño tesoro recogido por las abejas es mucho más que un producto apícola: es una auténtica bomba de nutrientes con efectos positivos en la energía, las defensas, el sistema digestivo y mucho más.
Si nunca has oído hablar de él (o no sabías todo lo que puede hacer por ti), sigue leyendo.
¿Qué es el polen de abeja?
El polen es una mezcla natural de granos microscópicos recolectados por las abejas de las flores, que luego enriquecen con néctar, miel y enzimas. Se presenta en forma de pequeñas bolitas de colores y se consume deshidratado o fresco.
Tiene un sabor entre dulce y floral, y se puede tomar solo, con yogur, batidos o ensaladas.
¿Cuáles son los beneficios del polen de abeja?
Aumenta la energía y la vitalidad
Gracias a su alta concentración de carbohidratos, proteínas y vitaminas del grupo B, el polen de abeja ayuda a mejorar el rendimiento físico y mental. Ideal para personas activas, estudiantes o quienes necesitan un impulso natural en su día a día.
Refuerza el sistema inmunológico
Contiene antioxidantes, enzimas y compuestos antimicrobianos que ayudan a fortalecer las defensas y proteger el organismo frente a virus y bacterias.
Perfecto para prevenir resfriados o recuperarte más rápido.
Mejora la digestión
El polen de abeja estimula la flora intestinal y favorece la absorción de nutrientes. También contiene enzimas digestivas que ayudan al cuerpo a asimilar mejor los alimentos.
Combate el estrés y el cansancio mental
Su perfil nutricional completo ayuda a equilibrar el sistema nervioso, mejorar el estado de ánimo y combatir la fatiga mental o emocional.
Alto valor proteico
Contiene entre un 20% y un 30% de proteínas, muchas de ellas en forma de aminoácidos esenciales. Esto lo convierte en un suplemento ideal para deportistas o dietas vegetarianas.
Favorece la salud de la piel y el cabello
Los antioxidantes y vitaminas del polen ayudan a mejorar la regeneración celular, combaten el envejecimiento y pueden mejorar el aspecto de la piel desde dentro.
¿Cómo se toma?
Lo más habitual es tomar entre 5 y 10 gramos al día (una cucharadita), en ayunas o repartido con las comidas.
Puedes mezclarlo con yogur, batidos, fruta, zumos o simplemente tomarlo solo.
Para un efecto completo, se recomienda hacer ciclos de 1 mes varias veces al año.
¿Tiene contraindicaciones?
Aunque es natural, el polen puede causar reacciones alérgicas en personas sensibles, sobre todo con alergias primaverales o al polen ambiental. En estos casos, es mejor comenzar con dosis muy pequeñas o consultar con un profesional.